El misterioso Día de los Brujos, en Catemaco
Durante el primer viernes de marzo, los hechiceros de esta población veracruzana se reúnen en un lugar secreto para realizar rituales que les permitirán “aumentar su poder y limpiar su alma”.
Encuentro a la medianoche
Muriendo el jueves, apenas arrancada la madrugada del viernes, empieza la misa negra (no se trata propiamente de una misa oscura como las relacionadas con los cultos al diablo, aunque se rumora que algunos brujos negros sí las hacen para renovar su pacto con éste. Los brujos blancos las llaman así porque son ritos de purificación “para retirar lo negro que han retenido de sus clientes y para hacer limpias más efectivas”), en un lugar donde se evita la reunión de los curiosos, para lo cual se pide un pago a la entrada. Entonces, comienza el evento mágico:
En principio se trazan con callos límites donde se hará uso de lamagia y la purificación. Alrededor hay antorchas sin encender y en el suelo aparece dibujada una estrella de seis picos o de David. Asimismo, múltiples veladoras se colocan en estos contornos, para que el trazado también sea con fuego, el cual significa purificación.
La estrella de David es considerada por el brujo blanco como benéfica, pues quienes usan la de cinco picos o pentagrama lo hacen para convocar al mal y llamar al demonio. Al fondo puede verse otra estrella de David, hecha de palos y forrada de tela, para ser encendida como las antorchas circundantes.
A los lados hay dos tiendas donde los ayudantes del brujo harán limpias menores.
En una mesa se concentran las hierbas y pociones mágicas para realizar las limpias a las personas que así lo solicitaron y que a menudo han viajado desde muy lejos para ser liberados de sus males y atraer la fortuna a sus vidas. De este modo, se disponen sillas para aquellos en espera de la purificación, mientras el brujo mayoraparece con sus ayudantes vestidos con túnicas blancas.
El brujo mayor comienza ordenando que se encienda el fuego y todo adquiere otro matiz y dimensión, así como la sensación de encuentro con lo desconocido, pero el mayor asombro es cuando se enciende la estrella de seis picos.
El brujo dice unas palabras para sí mismo y después sacrifican una gallina negra, que representa el mal que se entrega para ser purificado. De inmediato, comienza la misa negra.
Durante la ceremonia, según comenta Pedro Gueixpal Covix, llamado por la gente de la región como el Brujo Mayor, se abren las puertas deEl Encanto, en donde está el Señor del Encanto, a quien le rinde cuentas por lo realizado durante el año y se le pide la purificación de su alma para seguir ayudando a la gente a liberarse de sus males. Con la apertura se liberan energías que pueden usar tanto brujos blancos como negros. Esto sólo se permite cada primer viernes de marzo, día idóneo para hacer limpias espirituales, curaciones de casas, negocios, bienes materiales, trabajos especiales.