Fashion Week México: magia CELESTINA
El primer día de Fashion Week México cerró con una dosis de pura fantasía gracias a Alexia Ulibarri. La diseñadora mexicana presentó CELESTINA, una colección que parece salida de un sueño brujil de lujo: tules etéreos, corsetería estructurada y una paleta de tonos que viaja entre los pasteles y los colores intensos. Todo con ese toque característico de Ulibarri que mezcla lo artesanal con lo ultramoderno.
Desde el primer look, el público sabía que no estaba ante una pasarela cualquiera. Fashion Week México se transformó en un universo donde la moda y la magia se encontraron para hablar de poder femenino, energía y transformación.

Además, esta colaboración con Volvo no solo fue estética: reflejó una visión sustentable y vanguardista que encaja con la nueva generación de consumidores que valoran tanto el estilo como la conciencia ecológica.
Fashion Week México se llena de magia y poder
Por un lado, los diseños parecían tener vida propia. Las capas de tul se movían como nubes en movimiento, los corsets delineaban figuras casi etéreas y los peplums irregulares rompían con las reglas clásicas de la silueta. Pero más allá de lo visual, CELESTINA fue una declaración de fuerza: una celebración de la independencia y la feminidad moderna.
Por un lado, los diseños parecían tener vida propia. Las capas de tul se movían como nubes en movimiento, los corsets delineaban figuras casi etéreas y los peplums irregulares rompían con las reglas clásicas de la silueta. Pero más allá de lo visual, CELESTINA fue una declaración de fuerza: una celebración de la independencia y la feminidad moderna.
Por otra parte, el styling fue una joya futurista. Peinados que cubrían parcialmente el rostro y botas de tacón con aire rebelde crearon una mezcla entre misticismo y energía urbana. Era como si cada modelo fuera una hechicera contemporánea, segura de su poder y lista para conquistar el mundo (con mucho estilo, claro).

Finalmente, lo más interesante fue cómo Alexia Ulibarri logró conectar la nostalgia del romanticismo con la estética actual. Sus prendas no solo se usan, se viven. Y esa es, quizás, la verdadera magia detrás de CELESTINA: la habilidad de hacerte sentir parte de algo más grande, más poderoso y más tuyo.
En conclusión, Fashion Week México fue el escenario perfecto para recordarnos por qué la moda mexicana sigue creciendo a nivel internacional. Alexia Ulibarri demostró que las pasarelas no solo son para mostrar ropa, sino para contar historias que empoderan, inspiran y nos hacen creer, aunque sea por un momento, que la magia sí existe.
