El Santuario: Más Que un Resort
El Santuario es muchísimo más que un resort de lujo; es una puerta a una experiencia espiritual y profunda en Valle de Bravo. Desde el primer momento en que entras y te recibe la Fuente del Cisne, sabes que este lugar tiene algo especial. No es solo un espacio físico, es un entorno de paz y reflexión.
Texto y Fotos: El Poderoso Dave
Un Lugar con Propósito
Además, El Santuario no es solo un conjunto de habitaciones, sino que cada una de sus 64 piezas representa un “hexagrama” del Libro de las Mutaciones. Me tocó la habitación 25 de la Inocencia, lo inesperado; invitándome a que en este viaje estuviera dispuesto a abrazar lo que no estaba en mi control. Aquí, cada detalle está pensado para conectarnos con el propósito espiritual de nuestra estadía.
Por otro lado, la construcción misma de este resort sobre una montaña de cuarzo y granito busca la armonía con la naturaleza, y el ambiente que genera es difícil de describir, ¡tienen que vivirlo!
Sabores para el Alma
Después del “room tour”, llegó lo que esperábamos: ¡la comida! La experiencia culinaria aquí no es solo un gusto, es un viaje. Desde unos esquites deliciosos hasta un aguachile negro, cada plato refleja la conexión entre cuerpo, mente y naturaleza. Aquí, incluso los espejos de agua que cruzas para llegar al restaurante representan puentes entre lo físico y lo espiritual. La comida es solo una parte de esta inmersión total.
Si tienen curiosidad, el menú del restaurante Xian está diseñado para cada glándula energética, ofreciendo platillos que buscan equilibrar nuestro cuerpo según nuestra energía y necesidades. Como lo explica el chef en esta entrevista completa, su visión es nutrir cuerpo y alma en un ciclo que nos conecta con la tierra y a nosotros mismos.
Terapias y Conexión Espiritual
Además de la comida y el entorno, el spa en El Santuario ofrece un sinfín de terapias espirituales, desde lecturas de cartas hasta masajes que, honestamente, se sienten eternos. Al recibir el masaje, sentí que el tiempo se detuvo y me invadió una paz que me reconectó con mi cuerpo. Estos detalles no son comunes en cualquier spa; aquí realmente entienden lo que significa bienestar.
Por si fuera poco, la experiencia incluye terapias como la armonización con cuencos, guiada por expertas que te llevan a un estado de paz inigualable. La magia de El Santuario es real, y es justo esa mezcla de espiritualidad y comodidad lo que me hizo pensar que este lugar es más que un resort.
Si buscan algo más que un resort, El Santuario es el lugar. Aquí cada espacio, cada comida y cada ritual están pensados para ofrecer una experiencia espiritual completa. No es un destino de lujo más; es un espacio donde, además de descansar, encuentras paz y sentido en cada rincón