Estrategias para Espacios que Transforman
Oye, ¿te has puesto a pensar alguna vez cómo hacen los arquitectos y diseñadores urbanos para mantenerse al tanto de todos los cambios que pasan en el mundo? Pues justo de eso se trataba el seminario donde estuvo la arquitecta Sol Camacho, una crack en diseño urbano, que fue invitada por MillerKnoll para dar una charla súper top. En un mundo que cambia a mil por hora, la arquitectura también tiene que evolucionar, ¿y sabes qué? También tiene el poder de cambiar la sociedad.
Sol, que es la fundadora de RADDAR, un estudio que está revolucionando cómo vemos los espacios urbanos, dio una charla que estuvo llena de ideas frescas y súper profundas, llamada “Light Strategies for Heavy Changes” (Estrategias ligeras para cambios profundos). Ella estuvo hablando de cómo la arquitectura no solo tiene que ser funcional, sino también una herramienta para generar cambios sociales reales.
Espacios para la Gente
Uno de los puntos más chidos fue sobre la importancia de crear espacios comunitarios que realmente sirvan para la gente, no solo para hacer edificios bonitos o exclusivos para unos pocos. Esto pasa mucho en ciudades como la CDMX o São Paulo, donde muchos edificios privados están diseñados más para la comodidad de unos cuantos, limitando las interacciones entre la gente. En el seminario, se habló de cómo los espacios públicos tienen que tener un propósito social real, y que no se trata solo de un tema de diseño, sino de cómo la gente interactúa en esos lugares.
Un ejemplo que estuvo increíble fue el del SESC Pompeia en São Paulo, que Lina Bo Bardi transformó de una vieja fábrica de tanques de petróleo en un centro comunitario. Lo más cool de este proyecto es que aprovechó lo que ya existía, sin destruir la estructura original.
¡No Todo es Demolición!
También se habló de la importancia de reparar y reutilizar. O sea, en vez de destruir todo para hacer algo nuevo, ¿por qué no aprovechar lo que ya tenemos? RADDAR, el estudio de Sol, es un ejemplo perfecto de esto. Sus proyectos de revitalización de estructuras viejas son un claro ejemplo de cómo convertir lo viejo en algo nuevo sin destruirlo. Como el proyecto de la planta baja del COPAN en São Paulo, que pasó de ser una agencia bancaria a un restaurante nice y moderno. Lo importante es aplicar estrategias ligeras que respeten la historia del lugar, pero dándole una nueva función.
Otro proyecto que estuvo brutal fue el Casa Itu en São Paulo, que pasó de ser un almacén abandonado a un espacio mixto que cuestiona cómo solemos ver la vivienda en las ciudades. Lo mejor es que todo esto se hizo respetando el contexto social, algo súper importante cuando hablamos de diseño consciente.
Dando Nueva Vida a los Espacios Urbanos
Lo chido de este enfoque de diseño no solo es restaurar edificios, sino crear espacios donde las personas puedan conectarse. Por ejemplo, el Proyecto Pacaembu en São Paulo, que transformó un estadio antiguo en un centro multifuncional que ofrece no solo instalaciones deportivas, sino también culturales y recreativas. Este tipo de proyectos busca mejorar la calidad de vida de las personas y fomentar el sentido de comunidad.
Y todo esto no se puede lograr sin la colaboración. La arquitectura consciente necesita que todos se pongan de acuerdo. MillerKnoll lo entendió súper bien, por eso invitó a Sol Camacho y otras figuras del diseño. Es como cuando te juntas con tus amigos para hacer algo chido, cada uno aporta algo diferente y al final sale algo mucho mejor de lo que podrías hacer por separado. En la arquitectura pasa lo mismo: no se trata de imponer una idea, sino de crear algo juntos que tenga sentido para todos.
Al final, lo que nos queda claro es que el futuro de la arquitectura tiene que ser con una nueva mentalidad. El cambio ya está pasando, y este enfoque de diseño consciente tiene el poder de transformar las ciudades en lugares más humanos, inclusivos y sostenibles. Usar estrategias ligeras, reparar edificios viejos y reutilizar espacios no es solo una moda, es el camino a un futuro más responsable con el medio ambiente y con las comunidades.
Este enfoque no solo está cambiando la arquitectura, también está cambiando cómo nos relacionamos con nuestros entornos urbanos.
Así que, si eres estudiante de arquitectura o simplemente te interesa el tema, recuerda que el futuro está en nuestras manos y en los espacios que construimos. ¡No se trata solo de levantar paredes, sino de diseñar con conciencia, pensando en el impacto social y ambiental de cada proyecto! Lo que hagas hoy puede cambiar la vida de muchas personas mañana.