Inversiones, un panorama donde no todos ganan

Los mercados financieros desde su creación hasta la actualidad tienen un papel fundamental dentro de la estructura económica de los países, su influencia es tal que permiten a las empresas, negocios, ahorradores e inversionistas y en sí, a la economía en general a crecer, pues la asignación de recursos es más eficiente. 

Para que esto suceda, los sistemas de los mercados financieros deben de funcionar adecuadamente, tener un tamaño que cumpla con todas las exigibilidades y sea capaz de cubrir los retos que enfrentan los mercados de capitales, además de poseer estabilidad sistémica para garantizar un nivel elevado y sostenido de crecimiento.  

Como ya se había mencionado, el principal objetivo de los mercados financieros es la asignación eficiente de los ahorros de los agentes hacia las organizaciones y/o empresas, que en busca de poner en marcha proyectos potencialmente lucrativos, se fondean mediante la emisión de activos financieros o de deuda, donde entra en juego la figura de los intermediarios, que hacen posible la transferencia de fondos entre los agentes económicos.    

Para el cumplimiento de su principal objetivo, los mercados financieros tienen diversas funciones, entre las más importantes destacan;  

• Intermediación, donde básicamente ponen en contacto a las unidades económicas deficitarias de fondos con los agentes que poseen excedente de capital.
• Reducción de plazos y costos para los agentes que participan en el mercado. 
• Ser un mecanismo de fijación de precios de los activos.  

Los diversos analistas financieros parten de dos ejes en la investigación del comportamiento de los mercados con el objetivo de encontrar oportunidades de negocio donde los rendimientos sean muy altos y el riesgo sea lo más bajo posible. 

De hecho, en el hacer cotidiano de inversionistas, las transacciones y la búsqueda de mejores o mayores rendimientos se fundamentan en el corto plazo con análisis técnico y la experiencia en el comportamiento de un activo en el tiempo. Mientras tanto en la búsqueda de rendimientos a mediano y largo plazo el análisis fundamental es imprescindible, el conocimiento sobre la empresa es más importante.

Sin embargo, el sistema financiero podría catalogarse como un mal necesario de la economía, esto debido a que las expectativas de los agentes para la toma de sus decisiones financieras se pueden ver influenciadas por las tendencias actuales, me refiero a que si se empiezan a ver tendencias significativas en el comportamiento de los activos las expectativas tenderán a ser homogéneas, lo que podría generar burbujas especulativas que generan las crisis financieras y económicas. 

Claramente existen 3 tipos de personas, los que ganaron por poseer un portafolio de acciones que genero rendimientos positivos y que decidió salirse en el punto más alto de la burbuja, los que perdieron su dinero por entrar en el punto más alto de la burbuja y cuando estallo, el valor de su portafolio se desplomó dejándole perdidas muy fuertes y los que a pesar de no participar en el sistema financiero son arrastrados por la crisis generada por la especulación, crisis económicas derivadas de crisis financieras hay muchas, las más fuertes, la gran depresión de 1929 y la crisis inmobiliaria de 2008. 

Por ese motivo es que el sistema financiero y las inversiones en él, es un lugar donde no todos ganan.