Fraudes en el Buen Fin: ¡Alerta!
El Buen Fin, el evento de descuentos más grande de México, promete generar una derrama económica de 165,500 millones de pesos este 2024, según la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur). Este evento, que en su mayoría entusiasma a cons2umidores en busca de ofertas irresistibles, también abre las puertas a un riesgo poco visible, pero súper peligroso «el fraude digital».
Si bien para las grandes empresas el Buen Fin puede ser una oportunidad dorada para aumentar sus ventas y atraer clientes, para muchos emprendedores, especialmente los de pequeños negocios, esta fecha puede convertirse en una verdadera pesadilla. Y es que mientras algunos ven descuentos, los estafadores ven una oportunidad para hacer su agosto.
El lado oscuro del Buen Fin
¿Te imaginas estar en plena temporada de ofertas, confiado en que el dinero empezará a fluir a tu cuenta, solo para descubrir que todo fue una estafa? Tristemente, esa es la realidad para muchos pequeños emprendedores en México, quienes, según la Radiografía del Emprendimiento en México 2024, han sido víctimas de fraudes en el 84.3% de los casos. ¡Es un dato alarmante! Pero lo más grave es que casi el 5% de estos negocios se ven obligados a cerrar por las pérdidas económicas que estos fraudes ocasionan.
La situación es aún más preocupante si pensamos que los estafadores están cada vez más sofisticados. Se infiltran en los marketplaces y redes sociales, y a través de un perfil “confiable”, logran engañar a los emprendedores. Entonces, ¿cómo proteger tu negocio de estos fraudes durante el Buen Fin? Te compartimos algunos consejos que podrían marcar la diferencia entre el éxito y la quiebra de tu negocio.
Las Dos Caras del Fraude Digital
Lo primero que debes saber es que los fraudes no solo se dan por parte de compradores; los proveedores también pueden ser los villanos de esta historia. Patricia Montes, investigadora de Klibu, explica que hay dos modalidades de fraude muy comunes durante el Buen Fin:
- Los compradores fraudulentos: Estos delincuentes se hacen pasar por clientes potenciales que buscan productos a precios bajos o difíciles de conseguir. El truco está en que, una vez que realizan el pedido, desaparecen sin dejar rastro. En algunos casos, incluso piden envíos urgentes para recibir el producto antes de que el vendedor note que el pago nunca llegó a su cuenta. El resultado: el emprendedor pierde el producto, el dinero y, en muchos casos, su confianza en las ventas en línea.
- Los proveedores falsos: Aquí, los estafadores actúan como proveedores o distribuidores de productos, ofreciendo precios demasiado buenos para ser verdad o facilidades de pago irresistibles. Pero, al final del día, solo buscan exprimir hasta el último centavo de los emprendedores que caen en sus redes. Estos «proveedores» pueden ser difíciles de identificar, ya que se presentan con una fachada profesional y bien cuidada, pero en cuanto los pagos son realizados, desaparecen sin dejar rastro.
La Trampa de los Marketplaces
Los marketplaces son como la jungla digital: aunque hay mucho potencial para que un negocio crezca, también es el lugar perfecto para que los estafadores se camuflen. Y es que muchas veces las plataformas no cuentan con los mecanismos de seguridad necesarios para identificar a estos compradores fraudulentos. Esto convierte a los pequeños emprendedores en blancos fáciles, ya que no siempre tienen acceso a herramientas que les permitan verificar la identidad de los clientes o proveedores con los que están tratando.
¿Qué Hacer para Proteger tu Negocio?
En este escenario, lo más importante es estar alerta y tener un plan de acción para prevenir fraudes. Te comparto algunos consejos prácticos que podrían ayudarte a minimizar el riesgo de caer en trampas durante el Buen Fin:
1. Verifica la Identidad de los Proveedores
Antes de realizar cualquier compra o aceptar grandes pedidos, asegúrate de que el proveedor sea legítimo. Puedes usar herramientas como Klibu, que te permiten verificar la existencia de documentos oficiales y antecedentes de la empresa. Si el proveedor se muestra reacio a compartir esta información, ¡ojo! Es una señal de alerta.
2. Investiga a los Compradores
En la mayoría de los casos, los compradores fraudulentos piden productos costosos y requieren envíos urgentes. Si bien no todos los clientes con estas solicitudes son fraudulentos, siempre es bueno investigar su reputación en línea antes de hacer el envío. Si el comprador no tiene historial o referencias claras, mejor piensa dos veces antes de aceptar el pedido.
3. Evita Pagos Directos sin Intermediarios
Uno de los métodos más comunes que usan los estafadores es pedir transferencias directas o pagos sin intermediarios, como las plataformas de pago seguras. Las plataformas confiables protegen tanto a los compradores como a los vendedores, lo que significa que, si algo sale mal, hay mecanismos de protección disponibles. No aceptes pagos fuera de estos sistemas, por más tentadores que puedan parecer.
4. No te Dejes Llevar por Ofertas Demasiado Buenas para ser Verdad
Aunque las ofertas del Buen Fin son irresistibles, si algo suena demasiado bueno para ser cierto, probablemente lo sea. Los estafadores suelen ofrecer productos a precios increíblemente bajos, a veces hasta debajo del costo. Si tienes dudas sobre la autenticidad de un proveedor o cliente, no dudes en hacer preguntas adicionales. Un verdadero negocio nunca tendrá problemas en compartir más detalles.
5. Revisa la política de protección de las plataformas
Asegúrate de que las plataformas en las que trabajas tengan políticas claras de protección y devoluciones. Las mejores plataformas de comercio electrónico y marketplaces tienen sistemas de verificación para garantizar que tanto los compradores como los vendedores estén protegidos.
Uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan los emprendedores es la falta de educación sobre cómo identificar y prevenir fraudes. En muchas ocasiones, estos negocios no cuentan con la formación adecuada en ciberseguridad o en el uso de herramientas digitales que les permitan estar un paso adelante de los estafadores. Por eso, es fundamental que los emprendedores se informen y busquen apoyo en plataformas que les ayuden a identificar riesgos antes de que sea demasiado tarde.
Fátima Herrera, de Klibu, advierte que la falta de regulación y mecanismos de verificación en algunas plataformas digitales facilita que los estafadores operen sin problema. Es crucial que los emprendedores no se conformen con lo que tienen y busquen soluciones que les ayuden a proteger su negocio de forma más eficaz.
Más Allá de las Pérdidas Económicas
Aunque el daño financiero es lo primero que viene a la mente, los fraudes también tienen un impacto emocional en los emprendedores. La sensación de vulnerabilidad y desconfianza puede hacer que muchos cuestionen si vale la pena seguir luchando por su negocio. En un país donde la mayoría de las empresas que cierran son micro y pequeñas, no podemos subestimar el impacto de estos delitos. Las pérdidas no son solo monetarias; también afectan la moral y la visión de los emprendedores, lo que puede tener consecuencias mucho más graves a largo plazo.
Si tomas medidas de protección adecuadas y te mantienes informado, el Buen Fin puede ser una de las mejores épocas del año para tu negocio. Así que, no dejes que los estafadores te arruinen la fiesta. ¡Haz de esta temporada un éxito con seguridad y estrategia!