«El Pambamuerto Que Arrasa en Redes»
Hola chicxs, se viene octubre, esa época en la que México empieza a oler a cempasúchil y pan recién horneado, y claro, también se prepara para su celebración más emblemática: el Día de Muertos. Este momento del año es especial, no solo porque recordamos a los que ya no están, sino porque la ciudad se llena de colores, sabores, y tradiciones que nos conectan con nuestras raíces de una forma única.
Entre todas las cosas maravillosas que nos trae esta temporada, hay un protagonista que no puede faltar: el pan de muerto. Ese pan tan fluffy y delicioso que, si eres como yo, ya estás contando los días para probarlo. Pero, ¿te has preguntado de dónde viene esta joyita culinaria? Bueno, el origen del pan de muerto es más deep de lo que imaginas, y su historia es una mezcla de choque cultural y creatividad. Flashback a la época de la conquista: los españoles, super espantados por los sacrificios humanos que eran parte de las ceremonias religiosas indígenas, decidieron cambiar la dinámica y crearon este pan de trigo, bañado en azúcar y pintado de rojo para representar un corazón. Un giro bastante dulce a lo que antes era una tradición sangrienta.
Lo cool es que, con los años, el pan de muerto ha evolucionado y se ha vuelto una parte esencial de las ofrendas del Día de Muertos. Pero hay más que solo eso. Estamos en plena revolución gastronómica, y un negocio de la CDMX llamado “Antojitos muy Vargas” decidió darle un twist increíble al clásico pan de muerto. ¿Qué se les ocurrió? Pues algo tan crazy y delicioso que te va a hacer salivar: el “pambamuerto”.
¿Qué es el “pambamuerto”?
So, el “pambamuerto” es justo lo que su nombre sugiere: una fusión entre el pambazo y el pan de muerto. Si te estás preguntando, “¿cómo que un pambazo y un pan de muerto juntos?”, te entiendo, porque la primera vez que lo leí, también pensé lo mismo. Pero trust me, el resultado es una bomba de sabor que no sabías que necesitabas en tu vida.
El pambazo, para lxs que no están tan familiarizadxs, es un clásico de la street food mexicana. Es ese pan que te sirven bañado en salsa de chile guajillo, relleno de cosas deliciosas como papa con longaniza, o suadero si quieres algo más intenso. Entonces, imagina combinar esa magia con la textura y forma del pan de muerto, que es suavecito y tiene esas bolitas y huesitos que simbolizan la muerte y el cráneo. Literal, los de “Antojitos muy Vargas” hicieron arte con esta idea.
Lo que hicieron fue darle al pan de muerto ese twist pambazo que le da un crunchy por fuera y esponjosito por dentro vibe. Le pusieron la salsa de chile guajillo y le añadieron papa con longaniza o suadero (sí, puedes elegir). Y obvio, no puede faltar la lechuga, el queso, la crema y la salsa que todo pambazo necesita para ser completo. ¿Te imaginas ese mix de texturas y sabores? Suena a algo que necesitas probar antes de que termine octubre.
La gastronomía mexicana nunca para de evolucionar
Algo que me encanta de la comida mexicana es que, aunque tenemos una cultura súper fuerte en cuanto a tradiciones, siempre hay espacio para innovar. Desde el taco de birria con queso que rompió el internet hace unos años, hasta el ramen taco que también se volvió viral, la gastronomía mexicana está en constante cambio, y el “pambamuerto” es el último ejemplo de eso.
La idea de jugar con algo tan tradicional como el pan de muerto y convertirlo en algo que puedes comer en la calle, con una salsa bien picosa y un relleno hearty, es simplemente genius. No solo hace que la comida sea divertida, sino que también atrae a una generación que está en busca de experiencias nuevas, pero que ama conectar con sus raíces.
Además, se siente como el equilibrio perfecto entre lo moderno y lo tradicional. Porque sí, puedes ir a comprar tu pan de muerto clásico y disfrutarlo con tu cafecito de olla, pero también puedes lanzarte a probar el “pambamuerto” y ver cómo se siente romper las reglas un poquito, todo mientras sigues celebrando una de las fiestas más importantes de nuestro país.
¿Dónde puedes probar el “pambamuerto”?
Si después de leer todo esto ya estás salivando y pensando “necesito un ‘pambamuerto’ ahora mismo”, good news: es bastante accesible. Puedes encontrar este manjar en “Antojitos muy Vargas”, un localcito que se ha vuelto bastante popular en la CDMX. Está ubicado en la calle 5 de febrero, número 514, en la colonia Álamos, alcaldía Benito Juárez. Así que si andas por la zona, es un must para agregar a tu lista de cosas que hacer este mes.
Lo que más me llama la atención de este lugar es que, a pesar de que están haciendo algo completamente nuevo, sigue siendo comida callejera. Y eso es lo que más me gusta de la gastronomía de México: que puedes encontrar platillos que son revolucionarios, pero sin perder esa esencia de comida hecha con cariño y pensada para el día a día. No tienes que ir a un restaurante fancy para probar algo increíble; puedes simplemente ir a un lugar como “Antojitos muy Vargas” y sorprenderte con lo que te ofrecen.
El poder de las redes sociales en la comida
Otro tema que vale la pena tocar es cómo las redes sociales han jugado un papel clave en el éxito del “pambamuerto”. No es raro ver que algo se vuelva viral en plataformas como Instagram o TikTok, y la comida mexicana ha encontrado su lugar en estos espacios. Los foodies siempre están buscando algo nuevo para compartir, y qué mejor que un antojito que mezcla lo mejor de dos mundos: lo tradicional y lo innovador.
El “pambamuerto” ha causado sensación, y no es para menos. Las fotos y videos de este platillo están por todas partes, y si eres de los que se deja llevar por lo que ve en redes (como yo, guilty), seguro ya te dieron ganas de probarlo. Este fenómeno es un reflejo de cómo los platillos mexicanos se están adaptando a los nuevos tiempos, donde la estética y el sabor son igual de importantes.
Las redes sociales han democratizado el acceso a estas innovaciones gastronómicas. Antes, si querías enterarte de algo nuevo, tenías que estar en el lugar correcto o conocer a alguien que te pasara el tip. Ahora, puedes enterarte de estas cosas con un simple scroll en tu feed. Y eso es lo que ha hecho que el “pambamuerto” llegue a tanta gente tan rápido.
El Día de Muertos como inspiración
No podemos olvidar que todo esto parte de una celebración mucho más grande y profunda: el Día de Muertos. Esta fecha tiene un significado especial en la cultura mexicana. No solo es un momento para recordar a los que ya no están, sino también para celebrar la vida y la muerte como partes inseparables de nuestra existencia.
El “pambamuerto” es una representación más de cómo los mexicanos encontramos maneras creativas de honrar nuestras tradiciones, pero también de cómo nos atrevemos a reinventarlas. Al final del día, el Día de Muertos es una celebración viva, que sigue evolucionando y encontrando nuevas formas de manifestarse, ya sea a través de ofrendas coloridas, desfiles impresionantes o platillos únicos como este.
Y es que, en el fondo, eso es lo que hace tan especial al Día de Muertos: es una celebración que no teme cambiar y adaptarse, pero que nunca olvida sus raíces. El “pambamuerto” es solo un ejemplo de cómo podemos seguir creando y disfrutando de nuestra cultura, mientras la mantenemos fresca y relevante para nuevas generaciones.
¿Vale la pena probarlo?
La respuesta es un rotundo sí. El “pambamuerto” no solo es una explosión de sabores, sino que también es una forma divertida de conectar con nuestras tradiciones de una manera diferente. Es una mezcla entre lo clásico y lo moderno, lo street y lo gourmet. Y eso, mis amigxs, es lo que hace que la gastronomía mexicana sea tan especial: siempre hay algo nuevo por descubrir, algo que nos sorprende y nos hace enamorarnos de nuestra cultura una y otra vez.
Si estás en la CDMX este mes de octubre, no pierdas la oportunidad de probar este antojito que está causando furor en redes sociales. Y si no, bueno, siempre puedes hacer tu versión casera y compartirla en Instagram. Sea como sea, el “pambamuerto” llegó para quedarse, y es una deliciosa prueba de que el Día de Muertos sigue siendo una celebración tan viva como siempre.